lunes, 4 de junio de 2012

C´est la vite

En ocasiones cuando ni yo mismo lo entiendo, cuando mi fe en el mundo sufre un pequeño revés, acudo a ti, para contarte sin decirte nada, todo aquello que pasa por mi mente y que deseo depositar en tus páginas para que se quede anclado en el pasado, al cual procuraré mirar tan solo para conseguir avanzar, con los ánimos que supone saber lo que ya pasó y sentir la tranquilidad de intuir tu futuro conociendo como fue tu pasado.
No quería escribirte, no quería hacer visible lo invisible, hacer consciente lo que hasta ahora es un sueño en mi subconsciente.
Repararé en la roca que un día me vio dejar de esconderme.
Viejo paño de lágrimas, terco compañero de viaje que conoce cada uno de mis secretos como nadie que sabe mirarme y dejar de hacerlo el tiempo justo para que no sienta su ausencia. Corriendo para huir de ti, termino donde nos conocimos.