lunes, 24 de octubre de 2016

Tres C****** me importa

Pisa fuerte allá donde vayas, no para dejar huella, sino para que se te escuche.
Cometimos un error, dejamos que otros acallaran nuestras voces cuando éramos más pequeños y no sabíamos lo especiales que podíamos llegar a ser, las historias que esconderíamos tras unos libros y unas gafas.
Que desde distintos puntos de España, del mundo, íbamos a poder contar; triunfos y fracasos acumulados en un expediente que fue más allá del académico, ese que realmente importa, la diplomatura en desamores, el experto en manipuladores, el máster en decir que "No", y los distintos cursos de "aprende a ser tu mismo" o "no importa lo que digan los demás".... todo eso que nunca quedó escrito en ninguna hoja, pero que es la mejor carta de presentación ante la más importante entrevista que harás, la de trabajar por tí, por tu vida.
Amigos que siempre estuvieron ahí y que tras años salimos adelante, mientras recordábamos nuestros años en el colegio, en el instituto, la universidad y después en la vida.
Chic@s siempre creíamos que a nosotros no nos iba a pasar, pero aquí estamos luchando cada día, luchando por sonreir, por pisar y patear, ¿por qué no?, ¿quién dijo que teníamos que dejar que fueramos nosotros los que dejaramos pasar?; una cosa es educación y otras enseñar a educar y eso también cuenta, tanto como lo primero.
Soñar lo que queráis, quizás no lleguemos. Sigamos contando años, lejos o más cerca, la vida nos acercará o nos distanciará pero los hilos perdurarán eternamente, una llamada de teléfono, un wassap por tú cumpleaños, una cerveza, una noche de locura o un camino entero donde rozarnos con el suelo al caer, pero también con el aíre al volar.
Hacía años que contuve aquello que podía hacer que me sintiera juzgado, hoy os animo a ello, como entrenamiento, para que calque la frase de mi próximo tatuaje antes de hacermelo:..."tres cojones me importa".

jueves, 20 de octubre de 2016

Comienza el viaje hacia el centro de mi mismo. Y SE ACABÓ TAMBIÉN¡¡

Tengo que empezar con un "joo" y terminar con otro "joo", ¿cómo puede ser que me olvide de lo maravillosa que es la vida tan amenudo?, ¿por qué cualquier pequeño impedimento es capaz de borrar la sonrisa de nuestros rostros?,  ¿por qué supeditamos nuestra felicidad a otras personas? ¿por qué el día y las personas tienen la capacidad de hundirnos?....
Ninguno sabemos nada con certeza, ¿por qué admitir lo que los demás nos digan como si fuera una verdad absoluta?, ¿a caso no nos dijeron que nacimos un 23 de mayo de 1989? y tan solo lo sé porque decido tener fe en que es así.  ¿a caso no nos dicen continuamente que confiemos? .
Y una decepción tras otra, y tras la enésima, las ganas de luchar, tienen que ser más fuertes y olvidar los motivos por los cuales no hacerlo, sino apostar siempre por aquellos que merecerán la pena, que tienen que merecerlo espero.

A veces derramo lágrimas y otras río, ambas a veces no las entiendo, tan solo surgen, pues lo demás funciona igual.
¿tengo que prometerme no dar sin recibir?, nunca fuí así, a lo mejor hay que empezar ahora.
Algún día me hundí otros salí a flote, alguno que otro llevaba a alguien encima de mi barca, dejándome arrastrar por el riachuelo, apenas sin agua para mi, pero avanzando más lento ibamos dos y cuando se llegaba a una orilla y a salvo, quedaba navegando por mi riachuelo, ese que debe de llevarme hacia delante, unas veces más caudaloso y otras menos.


viernes, 7 de octubre de 2016

Balance del nacimiento de este blog

Cerca casi de 5 años hace que nació este blog, algo mío, algo de todos, un contar a veces de una manera encriptada aquello que me ocurrió, otras más directo y sinciero y otras menos claro e impreciso. Cualquiera que haya compartido un ratito de su vida conmigo, sabrá que lo que más me apasiona en este mundo es escribir, un medio de evasión, de confesión y de rescatar y desechar todo aquello que merece y no la pena respectivamente.
Tras hacer un poco balance de todo lo ocurrido hasta ahora, creo que es demasiado, más de lo que hubiera imaginado que me iba a suceder. El ser humano tiende a recordar en mayor medida aquello que lo hizo llorar, aquello que lo puso en jaque, pero creo que romperé una lanza por dos motivos: uno por todas las risas, felicidad y amigos que conocí y lo que queda por recorrer y  otro, por aquello que me zarandeó contra el suelo, hizo de mi esta amalgama de sentimientos sin ordenar pero que conforman esta persona con la cabeza amueblada desde el día en que el piso se puso a la venta, aunque de poco sirvió.
Si me pongo a pensar en lo que ha pasado día a día en este tiempo, parece que ha sido toda una vida y efectivamente así fue, la mía.
Una vez vivimos con más intensidad otras con menos, cada uno tenemos un método, mentiríamos si dijeramos que conseguimos todo lo que soñamos en su momento, pero tambíen lo haríamos si dijeramos que con las nuevas cosas que descubrimos por el camino, no fuimos más felices y nos aportaron más felicidad de la que nunca creíamos encontrar.
Cuando puedes pasar fotos, leer aquello que escribiste y notar detrás de ese pinchazo de nostalgia que nos asalta, un sentimiento de que aquello que puede que no volverá, pero que te hizo sentir bien,   esa felicidad, ese momento es  lo que quedó para nosotros por siempre, nunca volveremos a vivirlo está claro, pero está dentro, allí donde habita el hombre que quisiste ser.
Nos continuaríamos mintiendo si dijesemos que somos felices, ya que la felicidad son momentos, que nos hacen sentir tan bien, que buscamos por todos los medios mantener ese sentimiento de forma permanence, pero si así fuera, no seríamos capaces de apreciarlo y darle el valor que tiene realmente, así como no supeditaríamos toda nuestra vida en su búsqueda, ni echaríamos tanta mano de la famosa frase  "yo busco la felicidad"...No señor, buscar momentos que te hagan feliz de forma temporal, para después continúar buscando y así de forma eterna, una montaña rusa que al final acaba con nosotros, pero que en cuya búsqueda está la magía de la vida.


martes, 13 de septiembre de 2016

Mis superpoderes

Mis superpoderes, vaya título, pero ¿y tú?, ¿qué superpoderes tienes?
                                       Resultado de imagen de superpoderes
Mi poder es el pasado, el recordar todo aquello que siempre me acompaña. Lo que pasé, lo que superé, lo que conseguí, lo que me hizo aprender y también aprender a olvidar. 
Mi poder es mi familia, el hogar al que volver cuando las cosas se tuercen o cuando van bien. 
Mi poder son mis amigos, que me golpean hasta que consiguen que duela y poder comenzar a sentir y reaccionar. 
Mi poder soy yo mismo cuando sonrío, cuando ilumino la mañana al despertar tan solo, tan tranquilo, en la primera respiración consciente de la mañana, en la cual me cabe el mundo en los pulmones, pero lo devuelvo al exterior con algo nuevo, visto a mi manera, con mi perspectiva. 

Miedo a estar Solo

Tiempo de escribir, de pensar y reflexionar. Pensaba que había tocado fondo, pero me di cuenta de que aún me quedaba hacerlo una vez más. Pensé que todo había acabado, separándome de lo que me hacía mal, pero me equivoqué, y de que forma y manera, de lo que realmente no me había deshecho era de mi mismo y me tiré por las escaleras, para que el dolor me recordara que sigo vivo y puedo sentir.
Hasta ahora, no lo quería expresar, no lo quería decir, por miedo al miedo que supondría.
Escribí una y otra vez "tú puedes", una palabra en cada mano, un canto al miedo de estar solo, al miedo de perderme a la vez que encontraba.
Siempre que las rimas no son las mejores, siempre que las palabras que elijo no están pensadas, solo escritas sin miedo a ver la luz, rompen esa pequeña bolsa que contiene las lagrimas que reservé para más adelante.
Basta, solo basta al miedo, basta a la soledad, basta a la vida.
Hasta ahora la anestesia me proporcionaba la fuerza para vencer estos días, como si todo no existiera hasta este momento, pero ese momento pasó y ahora toca levantarse y comenzar Solo.

Aunque las palabras "tú puedes" ya desaparecieron, quiero creer que la tinta penetró en las venas y poco a poco, como el antídoto ante el venero, irá empapando cada célula con su poder.

lunes, 12 de septiembre de 2016

Aquellos niñatos estupidos a los cuales abofetearon

La vida te sacude varias veces, varias veces al año, varias veces al mes y unas cuantas más al día, pero, ahí hemos de seguir, firmes.
Casi nunca sabemos cual será la respuesta o decisión acertada, tan solo el tiempo de alguna manera nos dará la razón o nos la quitará.
Miedos, todos tenemos. Nos persiguen desde que nos levantamos hasta que nos vamos a dormir, pero los mantenemos a raya, la mayor parte del tiempo, en otras ocasiones, nos comen terreno y tenemos que justificarnos a nosotros mismos de porque caíamos en ellos.
-¿qué nos salva? ¿quién nos rescata?: ..la respuesta es sencilla... solo nosotros podemos hacerlo. Nuestros yos pasados, aquellos niñatos estupidos a los cuales abofetearon, ahora los miramos y no podemos nada más que pensar "te lo tenías merecido, por tonto". Hoy que nos creemos que ya hemos madurado, crecido y aprendido unas cuantas lecciones en esta vida, nos dan de tortas cada día, pero las recibimos con más gracia.
Aún así, aunque te den una cuerda, puedes utilizarla de dos formas, para salir del pozo y otra, mejor no dar ideas.
El mundo está repleto de personas maravillosas, estupendas (algunas menos y otras nada desde luego), pero si buscas un poquito, hay  geniales personalidades de las que ser amigos, enamorarse y vivir... entre ellas, estás tú mismo, el primero debe ser siempre uno. Cree en ti mismo, sueña contigo y proyectate tan alto como te de miedo a caerte, porque aunque la hostia sea tremenda, tanto la escalada como la subida y el vuelo mientras caes, habrá merecido la pena.

sábado, 27 de agosto de 2016

Balance de 2016

Lo primero para escribir es encontrar esa canción que da igual las veces que la repitas, que cada vez que la escuchas, te hace sentirte mejor o peor, el caso es que despierte en tí algo desgarrador o algo supermotivador, que haga que digas o pienses lo que hasta el momento no habías sentido o atrevido a expresar.
Después de tener la canción, depende de cómo de bien o mal te sientas en ese momento, como de acompañado o solo estés en la vida, como de feliz o triste, saldrá de ti, aquello que no quieres ver.

Somos algo atípico en la vida, creo. Siempre me gustó pensar que lo de sentirse especial no dependia de como te vieran los demás sino de la visión de uno mismo y nosotros, solo depende de que nos lo creamos.
A veces en la vida, creo que hay no solo que aprovechar las fechas especiales o importantes para hacer balance, no se vosotros chicos, pero creo que este 2016 se está ensañando un poco  ......y también que no podemos esperar al 2017 para tomar ese impulso que te da el cambiar de peinado o ponerte tu camisa más bonita, sino que hablo de ese empuje que te ayuda a tomar decisiones que cambian vidas, que mueven corazones, que duelen a corto plazo, que descrebrajan a medio pero que curan a la larga.
Todos tuvimos un sueño y hablo en pasado, porque es inevitable, no acceder a esa parte de nosotros que la nostalgia conserva, pero sobrevivimos a él y eso nos enseñó que la vida tiene una extraña manera de cuidarnos. A veces tan solo nos deja miguitas de pan para que nos guié y los pajaros malvados del camino nos entorpecen para que nos desviemos, pero ¿sabéis qué?: que por muchas vueltas que demos, todos andamos perdidos en algun lado, pero lo importante es que seguimos tropezando en el viaje, y cuando caemos al suelo, somos capaces de ver los restos de esas migajas que nos indican que alguien pasó por allí antes que nosotros y continuó hacia delante.


domingo, 14 de agosto de 2016

Miedo

¿Dónde está el miedo?
El miedo a fracasar
El miedo a decepcionar
El miedo a equivocarme
El miedo a lo desconocido
El miedo a estar solo
El miedo a ser feliz
El miedo a que cuando algo va bien pasará algo que acabará con la felicidad
El miedo a no estar a la altura, de no poder hacerme cargo de aquello que tengo como responsabilidad.

A la deriva

Hay momentos de la vida donde tu estado de ánimo no depende de ti, donde estas a la deriva en un mar de sensaciones, y se sientas en la proa y solo rezas para que no haya ninguna roca en el camino que destroce los restos de tu barco naufragado, o que al menos si chocas, (porque lo harás) sea con algo que no te haga mucho daño. Y solo cierras los ojos y rezas, al dios del templo que estaba dentro de ti y que se marchó, y te dejó sin saber que sentir, sin nada propio, lo habías ignorado durante tanto tiempo que no vio la necesidad de quedarse. Un recipiente vacio que comienza a completarse de nuevo, pero el contenido no depende de ti, sino de la corriente en la cual se encuentres. 

Un dia de palabras falsas y silencios incómodos

Pasa el tiempo y la diferencia entre reir y llorar depende del segundo del reloj que marque, del momento del día en el cual esté repirando. 
Estos días tengo una curiosa sensación del hombre y es que nos encanta que nos compliquen la vida, que lo sencillo es para pardillos, que la adrenalina del sufrimiento mezclado con la intriga, que la pérdida de sueño en lugar de dormir a pierna suelta, crea más adicción que cualquier droga. Al final lo que buscamos es dependencia, no tranquilidad y devoción.
¿lo triste?.. que no falla, puede que como decía la película la mécánica del corazón no sea igual en todos, pero los engranajes no dejan de ser los mismos.
Determinadas características que hacen que salte el interruptor, pero que al igual que te encendió, es capaz de dejarte de nuevo en la penumbra, donde esperarán los que se dejan de complicaciones inútiles.
Las palabras están para utilizarlas, para decir la verdad, lo que se siente, lo que se piensa, no para interpretar los silencios o los eufemismos. 

domingo, 31 de julio de 2016

Esa punzada en algún órgano sin nombre, el momento de abrir los ojos, de hacer el esfuerzo de decirte que así será a partir de ahora.
Tu corazón comienza a palpitar con rapidez, tu mente quisiera huir a un rincón de su propia existencia, donde pudiera olvidar, flotar en un remanso de paz y tranquilidad.
Creo que podría llamarse pena, tristeza o nostalgia, no lo tengo muy claro.
Se terminó, me repito cada día, donde está mentira va cobrando fuerza y veracidad, en cada ocasión que vuelvo a ella.
Fue lo mejor, pero decir que es lo mejor, aquello que te desgarra por dentro, es complicado de justificar a un cuerpo que intenta sufrir lo menos posible, cómo convencerlo de que la guerra deja heridas que se ven y otras que sólo se pueden llevar y sin curar.

viernes, 22 de julio de 2016

HIJO DEL AYER Y HOY

Conocí a alguien, para que negarlo,
 hace mucho tiempo que lo conozco,
en ocasiones se equivocó, pero siempre estuvo ahí. A veces un poco gilipollas, pero como todos supongo, no creo que se enfade si lee esto.
Para no escucharlo, llegué incluso a ponerme los auriculares y subir el volumen de la música, pero tarde o temprano me iba a dormir y allí ya si que me decía todo lo que pensaba, ¿y quién lo podia ignorar?... yo desde luego no.
Pasó lo que tenía que pasar, que fuimos cumpliendo años y nos distanciamos, pero los buenos amigos nunca dejan de serlo, por tiempo y distancia que pase. Y me lo volví a encontrar, estaba en el metro en una parada cualquiera, tal día como hoy, estaba igual, alto, guapo y con esa mirada que es incapaz de ocultar nada; me estaba mirando a mí mismo, todo este tiempo, había sido yo, el mismo que esperó las largas noches a que me durmiese, el que hacía que riera cuando había que hacerlo y el que me dio cera cuando hice el tonto, YO todo el tiempo, pero lo olvidé.
A veces creo que le fallé, pero me supo perdonar, gracias a ello, creo que regresé.
Regresé a las noches de letras, a las mañanas de pensamientos, a la sensación de incomprensión que tan comodo me hizo sentir, a millones de años luz del mundo, pero tan cerca que soy capaz de apreciar las quimeras de los hijos del ayer y hoy.


viernes, 15 de abril de 2016

En busca....

En busca de los "te quiero" sin palabras, de las fuerzas de las miradas que ven con los ojos cerrados, de las canciones que se sienten sin melodía, solo letras que recuerdan gestos de amor, de aquellos sueños que no hace falta dormir para ver y de las utopias que no acaban con un "y comieron perdices". 
Futuros inciertos que pasaron el presente de las palabras que nunca se dirán. 
En busca de las largas conversaciones llenas de silencios y palabras que se ausentaron.
Preguntar, siendo conocedor de la respuesta; comprar en el mercado de las incógnitas, aquella mentira que más se ajuste con lo que se quiere escuchar. 
Retorcer el sentimiento, para que pueda caber dentro de la caja de "para más adelante".

domingo, 20 de marzo de 2016

Madrugada y lavadora

Cuando aprendes que hay personas que se quedaron atrás, y  echas la culpa a las circunstancias, cuando piensas "la vida sigue", pero cuando tiempo después comprendes que realmente no hiciste lo necesario para mantenerlas en tu vida, pero porque realmente ya no te apetecía hacerlo, no porque los hechos lo impidieran.
Cuando sientes tanto dolor que para dejar de  hacerlo, decides separarte, eliges poder vivir sin ello para no querer, para no sufrir, pero en esa ruptura se queda parte de ti y como una planta disecada, eres un ser humano sin alma, no se dibuja pupila en tus ojos, tan solo una mirada que te permite ver tan solo lo que se encuentra delante de ti, sin poder ver más allá.
Aprender a rectificar, pero por primera vez con uno mismo, pedirme perdón por hacerme tanto daño durante tanto tiempo, anteponiendo todo a mi mismo, y aún me queda mucho por lo que pedirme disculpas, pero sé que lo hará encantado porque ahora es su momento y poco a poco se lo recompensaré.
Tener miedo es buscar una solución y no encontrárla, o hallarla y no querer llevarla a cabo, sino tan solo ignorarla hasta estar listo para asumirla.


sábado, 13 de febrero de 2016

Perdiendo el tiempo

Muchos son los sentimientos que experimenté este año, aún no hice el balance tan siquiera de 2015, quizás porque me encontraba anestesiado, arrastrado por las circunstancias sin poder tomar demasiadas deciones, poco tiempo de reacción, casi literalmente diría yo, ha sido un tiempo para conocerme a mi mimso. Intenté descubrir la felicidad, en ese proceso creo que aprendí que tan solo es una sensación producto de nuestra mente, podemos decidir cuando ser felicides, es cuestión tan solo de actitud; la dificultad está en mantener la actitud por encima de todo.
Año intenso de aprender, de crecer, orgulloso de estar abierto, siempre con prudencia, al cambio, con pies de plomo comenzaré a determinar cual será ese destino que quiero y perseguiré.
Corrí en busca de mi propio avance, quizás por miedo a agotar el tiempo, por la necesidad de vivir todo antes de que sea demasiado tarde, pero me detuve, a propósito, porque también merecía un tiempo de reflexión, porque no?, de perder el tiempo, de no ser el que está pendiente de todo y de todos, que hace que todos estén bien para poder estar bien, yo mismo, el detallista que recibía tan solo portazos, pero que con ilusión siempre se levantaba porque creía que merecía la pena insistir por formar parte de algo, pero ahora todo eso ya pasó, ese superhombre continúa viviendo dentro de mi, pero dejará que toquen a su puerta. Sentir que no soy tan imprescindible, sentirme uno más en el mundo, alejarme de cada historia y persona, por miedo a sufrir la decepción de la traición, de la conspiración. Ya no es miedo lo que me aleja, es la ausencia de la necesidad, construí mi propio bastón sobre el que apoyarme, aún hay veces que caigo, pero ya me voy conociendo de alguna manera.
Aceptaré lo que mi corazón y mi mente decidan en conjunto, ambos siempre hicieron un gran equipo e hicieron de mi algo más que el niño del momento, siempre el hombrecito.

Dejaré a un lado lo correcto de lo incorrecto y acercaré algo más a mi lo que me apetece y lo que no, lo que me gusta y lo que no, lo que quiero y lo que no quiero, al menos por un tiempo.